domingo, 24 de mayo de 2015

Noah.

-¿Te quedarías conmigo? 


-¿Quedarme contigo? ¿Para qué? Míranos, ya estamos peleando.


-Pues, eso es lo que hacemos. Pelear. Tú me dices cuando soy un arrogante y yo te digo cuando eres una pesada insoportable. Lo cual es el 99% del tiempo. No me importa lastimarte. Me lo devuelves al instante y vuelves a hacer lo mismo..


-Entonces, ¿qué?


-Así que no será fácil, será difícil. Y tendremos que echarle ganas cada día, pero quiero hacerlo porque te quiero. Quiero todo de ti, para siempre, tú y yo. Cada día. ¿Harás algo por mí? Por favor, imagina tu vida. 30 años desde hoy. 40 años desde hoy. ¿Cómo se ve? Si es ese tipo pues vete, ¡vete! Te perdí una vez, creo que podría hacerlo de nuevo, si supiera que es lo que realmente quieres. Pero no tomes el camino más fácil. 


-¿Cuál? No hay manera fácil, no importa lo que haga, alguien se lastima. 

-Deja de pensar en lo que quiere todo el mundo. Deja de pensar en lo que quiero yo. En lo que quiere él o en lo que quieren tus padres. ¿Qué quieres tú?