lunes, 31 de marzo de 2014

Tu eres mi ciudad.

Descubrir una persona es exactamente igual que descubrir cualquier ciudad. Lo primero que hay que hacer es cruzar alguno de los puentes que llegan a ella. Te han hablado tantas veces de sus monumentos, de lo que no puedes dejar de visitar. Pero tú llegas siempre a través de lo que sólo se ve desde fuera; de los suburbios, la periferia. Tu intención es llegar al centro, a la parte histórica. Y una vez llegas, siempre descubres algo nuevo, algo que no estaba ahí. Porque las ciudades, como las personas, nos pasamos toda la vida cambiando. Cambiamos de aspecto, de tamaño, de estación, de ambición. Pero hay una cosa que jamás cambia... y es la intención de segur cambiando.

sábado, 29 de marzo de 2014

Pupilas que se dilatan, que deleitan, que delatan.

Hacer el amor no es follar.

No me importa quedarme desnuda, verte desnudo o desnudarte. No me importa hablar sobre sexo, follar o morir virgen. No me importa mi 
cuerpo o tu cuerpo con el mío. No me importan tus palmas sudorosas, tus labios agrietados o 
tu lengua sucia. No me importa 
tu música ruidosa, tu poesía de mierda, 
tus zapatos sucios o tu letra horrible. No me importan tus llamadas nocturnas
, tus besos robados o tus mentiras piadosas. No me importa tu hamburguesa a medio comer, tus lasañas congeladas o tu cabello alborotado. Quiero tu cepillo de dientes 
inclinándose hacia el mío en el vasito del baño. Quiero 
un masaje tuyo a las 3 de la mañana en la espalda. Tócame las tetas y no me digas que son pequeñas, que eso ya lo sé.
 Bésame una y mil veces más.
 Imagina que lo que estamos haciendo es ilegal. Siempre es bueno que nuestras bocas estén juntas. ¿Te apetece?

Caminante, si que hay camino.

Si todos los caminos llevan a Roma, ¿cómo se sale de Roma? 

A veces pensamos demasiado y sentimos muy poco. Mi abuelo siempre decía que si alguien quiere formar parte de tu vida, hará lo imposible por estar en ella. Aunque en cierto modo, cuando alguien nos dedica su tiempo, nos está regalando lo único que no va a poder recuperar. Y es que la vida son momentos; y ahora estoy aquí y mañana... bueno, mañana no lo sé. A sí que quería decirte que si alguna vez quieres algo, ve a por ello sin mirar atrás. Hay que mirar al miedo de frente y a los ojos. 

El beso de la perfeccion.

Quiero darle un beso.
No porque quiera sentir la suavidad de sus labios justo a los míos o el calor de su aliento mientras exhala contra mí.
Quiero darle un beso porque no encuentro otra forma mejor de expresar su belleza.
Quiero que sepa que le veo algo así como perfecto.
Porque él es perfecto.

domingo, 23 de marzo de 2014

Des-amor.

Lo bueno y lo malo que tiene el primer amor es que es el primero, cuando te alcanza no sólo te enamoras de la persona sino de estar enamorado.
 
El desamor es el segundo capítulo y después vendrán más. Serán mejores, menos exaltados, más profundos. Pero, como en la literatura, siempre irán hacia el final, nunca hacia el primer capítulo.

sábado, 22 de marzo de 2014

Debes saberlo, princesita.

Querida futura hija:

 
—Cuando estés en una fiesta, fumando un cigarrillo en la terraza con una chica rara de pelo rosa y ojos grandes y oscuros, pregúntale qué tal le ha ido el día. Te prometo que no te arrepentirás. Muchas veces te encontrarás con que la gente más extraña tiene las mejores historias que contar.


—Por favor, no confundas el deseo con el amor. El amor se traga tu alma; mientras que el deseo surge como el ácido, poco a poco va haciéndose camino a través de tus venas, te vas quemando de dentro hacia fuera.
 
—Esto es importante: nadie va a salvarte de tu mierda.

—Un día, llegará un chico que cuando te toque sentirás un fuego recorriendo todo tu cuerpo. Creerás que todas sus palabras saben a vainilla. Pero un día se irá y tú te querrás morir. Tranquila, cielo, esos malos sentimientos son sólo temporales.


—Siempre, siempre, siempre, tu salud mental viene antes que los estudios. Si suspendes un examen, no pasa nada: la inteligencia no se mide en aprobados o suspensos. A la mierda con cualquiera que te diga lo contrario.

Te quiero.

El ultimo poeta.

Durante la vida te enamorarás de mucha gente: el chico que te cobró el pan y te medio flirteó, tu mejor amigo, el espíritu libre, aquel chico con talento tocando la guitarra en el metro, el poeta frustrado, el que siempre te ignoró, aquel que no le queda más remedio que quererte porque te encuentra mona.

Pero entonces llega alguien. La persona que realmente entiende tu mirada al vacío, tus silencios ásperos, las manías que se visten de vicios y tus virtudes que son tus alas para tratar de sobrevolar cualquier infierno.
 
Pero lo curioso del caso es que por más tiempo que pase, para ese alguien, sigues siendo una buena pregunta sin respuesta alguna, un enigma casi absoluto. Quédate para que entre beso y beso no te olvides de por qué todavía eres su pregunta favorita.

lunes, 17 de marzo de 2014

El abrazo salvador.

En la primera semana de vida de una pareja de gemelos, cada uno estaba en sus respectivas incubadoras y uno no se esperaba que sobreviviera. Una enfermera incumplió las reglas del hospital y colocó a los dos bebés en una misma incubadora. Cuando se colocaron juntos, el más sano de los dos, pasó un brazo por encima de su hermana en un abrazo muy entrañable. El corazón del bebé más pequeño se estabilizó y la temperatura se elevó a la normalidad, consiguiendo que los dos sobrevivieran. 

Unico.

En esta vida hay tres caminos básicos para triunfar: ser el mejor, ser el primero o ser el único.
 
Ser el mejor es muy difícil; porque sólo hay uno.
 
Ser el primero es todavía más difícil; porque hay que llegar antes que todos lo demás.
 
Y luego está ser el único, que es lo más sencillo de este mundo. Todos podemos ser únicos, pero parece ser que nos esforzamos en parecernos a los demás... con lo fácil que es ser como se quiere, joder.

Señales.

Letreros, rótulos, consejos, sugerencias: están ahí para anunciarte el futuro, lo que vendrá, y para recordarte la diferencia entre "sentido" y "dirección". Porque tú puede que avances sin sentido y por avanzar, pero sin una dirección jamás le encontrarás sentido a nada... y a veces ni con esas. Señales: a veces la vida te las da y a veces también te las deja. Señal de todo lo que te queda por aprender. Destinos, metas, objetivos, sueños, ideas... a las que siempre les pedimos lo mismo; "hazme una señal". Ojalá siempre fuera tan fácil verlas venir.

martes, 11 de marzo de 2014

Te amo.

Reemplaza la "T" por una "M" y serás más feliz.

Bajo la misma estrella.

—¿Puedo volver a verte? —me preguntó. Su voz sonó nervios, y me pareció entrañable.
—Claro —le contesté sonriendo.
—¿Mañana? —me preguntó.
—Paciencia, saltamontes —le aconsejé—. No querrás parecer ansioso...
—No, por eso te he dicho mañana —me contestó—. Quisiera volver a verte hoy mismo, pero estoy dispuesto a esperar toda la noche y buena parte de la mañana.

Sentarse, a veces, es viajar.

Existe un lugar donde han nacido todas las crisis. Un lugar donde todos nuestros éxitos van a morir. Un lugar al que nunca debería haber llegado ni el ruido, ni la mentira, ni el grito, ni la confusión. Un lugar en el que un silencio vale más que mil palabras; al que sólo se accede con algo de tiempo y reflexión. Ese lugar no está en ningún sitio, porque ese lugar está dentro de nosotros. Y el único camino para llegar a él no se llama "viaje", sino "conversación". Sentarse a charlar. Sentarse a escuchar. Sentarse a aprender. Sentarse de cualquier modo... y con quien haga falta. Pero sentarse, al fin y al cabo. Y aún así ser conscientes de que se está viajando.

Y lo vuelves a intentar...

Ocurre todos los días; justo cuando parecía que la oscuridad ya había ganado la partida, de pronto algo aparentemente insignificante empieza a cambiar. Es algo, al principio, muy pequeño a lo que nadie le presta atención; pero es algo que va ganando terreno, que va imponiéndose, poco a poco, y cambia tu manera de verlo todo. Y, como quién no quiere la cosa, te redescubre el mundo otra vez. Y sin tener ni puta idea del porqué, tú lo vuelves a intentar; aunque sepas que la noche también volverá.

Salir.

Salimos al mundo. Salimos del cascarón. Salimos de casa. Salimos con alguien. Salimos de dudas... de algunas. Salimos de una, para meternos en otra. Salimos de marcha. Salimos del país. Salimos del armario. Salimos de cuentas. Hay días que nos salimos; y otros no salimos, sino que en realidad estamos entrando. Salimos de aquí. Salimos de allá. Y aún no sabemos si saldremos de esta. Saldremos como podamos... aunque sea por patas, pero saldremos. Y ese día alguien nos preguntará de dónde hemos salido. Y les diremos que en realidad seguimos saliendo.

domingo, 2 de marzo de 2014

J. L. B.

Y después de un tiempo, uno aprende que si es demasiado, hasta el calorcito del sol quema. 

Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar que alguien le traiga flores.